La Anunciación o Salutación Angélica, el episodio de la vida de la Virgen María en el que el arcángel Gabriel le anuncia que va a ser madre de Jesús, es denominada en la tradición folclórica búlgara Blagovets. Es un nombre derivado del vocablo búlgaro por dulzura puesto que es “dulce”, es decir buena, la noticia comunicada.

La tradición manda acatar determinadas normas de comportamiento en este día: tener sin falta algún dinero y una espina de pescado en el bolsillo, no salir de casa con hambre y, obligatoriamente, estar de buen humor porque, dice la creencia tradicional, según cómo te encuentres este día al escuchar el primer canto del cuclillo, tal será tu suerte en el resto del año: con o sin dinero, con o sin suerte (simbolizada por la espina de pescado), de buen o mal humor, etc. A continuación nos referiremos a algunos ritos mágicos practicados en Blagovets.

La festividad  de la dulce noticia, Blagovets, se celebra el 25 de marzo, fecha en que la Iglesia Ortodoxa Búlgara hace homenaje a la Anunciación. Como es sabido, según el Evangelio de Lucas (Lc 1:26-37), en este día el arcángel Gabriel se le presentó a la Virgen para anunciarle la buena nueva de su maternidad.

En el mundo cristiano esta fecha se venera desde el siglo IV. Hasta el establecimiento del gobierno comunista en 1944, que impuso el ateísmo en Bulgaria, la Anunciación era celebrada también como el Día de la Madre. Hay múltiples testimonios de ello en la prensa periódica, los archivos y los libros de memorias. Hoy, con la reforma democrática del país iniciada en 1989, la tradición se ha restablecido.

Las raíces de la festividad folclórica de Blagovets (el Día de la Buena Nueva) se remontan a la época precristiana con sus ritos paganos, desarrollados y enriquecidos a lo largo de los siglos. La fecha es muy próxima al comienzo astronómico de la primavera y agrupa diferentes ritos destinados a recibir el comienzo de un nuevo ciclo vital.

La Anunciación siempre coincide con la Cuaresma y por ello en este día no se come carne sino pescado. El mismo está presente también en la fiesta folclórica de Blagovets. Según la creencia tradicional, en este día, todos deben comer un bocado del manjar festivo preparado de pescado y limpiarse luego los dientes con una espina de éste, porque así tendrán suerte y buena salud el resto del año.

Según la creencia tradicional, en Blagovets se escucha el primer canto del cuclillo, que anuncia la buena nueva de que el invierno se ha marchado y se aproxima el verano. La tradición manda saciar bien el hambre en este día y no salir de casa sin unas monedas en el bolsillo y un trozo de pan en el otro, como augurio de bienestar y abundancia.

Dice la tradición que en este día los osos y las sierpes despiertan, y abandonan sus guaridas y refugios invernales. Para prevenir las picaduras de serpiente durante el verano, en Blagovets las mujeres y los niños daban una vuelta a la casa, al patio y al huerto haciendo sonar las tenazas para avivar el fuego, tijeras y otros objetos metálicos del hogar con el fin de ahuyentar a los reptiles.

Otro elemento obligado de los festejos tradicionales en Blagovets es la limpieza de la casa y la quema de la basura recogida. Muy temprano en la mañana se tiraban fuera todos los objetos inútiles y se les prendía fuego. Los moradores de la casa saltaban sobre este fuego descalzos procurando ahumar bien sus pies porque se creía que así se protegerían de picaduras de serpiente durante el verano.

Hay también muchas leyendas asociadas a los tesoros enterrados. Se creía que en Blagovets sobre ellos aparecía una llama azul por lo cual la noche en la víspera de la fiesta los buscadores de tesoros recorrían el campo y las colinas alrededor de su pueblo con la esperanza de ver esa mágica señal.

En Blagovets los apicultores abren las colmenas y dejan salir a las abejas, para que sea dulce la miel que recogerán durante el año. En algunas zonas las muchachitas hacen rodar en los prados pequeños panes rituales para que sean ligeras las faenas agrícolas. Muchas de las canciones que acompañan la celebración folclórica de Blagovets hacen referencia al canto del cuclillo que anuncia la llegada de la primavera y hacen votos de que todo sea dulce, bueno y positivo durante el año.

Versión en español por Raina Petkova