Hace pocos días Lili Bogdanova presentó su primer álbum en solitario denominado “La niña de los cabello de lino”, como es el título de una de las piezas incluidas en la colección. El nombre del disco presenta un matiz personal, ya que el pelo de la joven pianista de veras tiene el color del lino. Ella es una chica bella y fina, igual que las mozas que pinta la música de Claude Debussy. Las grabaciones fueron hechas en la Universidad de Música y Bellas Artes de Viena. El concierto tuvo lugar el 24 de noviembre en la sala de cámara Bulgaria.

Aparte del álbum nuevo, Lili tiene otro motivo de orgullo profesional. En noviembre participó  en el Concurso Internacional para pianistas bajo la égida de la princesa de Mónaco, Lalla Meryem.

“Me he presentado en muchos concursos para piano, pero este es el más importante de mi biografía hasta el momento. Tomaron parte más de 100 intérpretes de 20 países como Rusia, Francia, Italia, Japón, entre otros. El premio que gané es una distinción especial que se concede por la mejor interpretación de una obra de Mozart. La pieza estaba entre las obligatorias para el concurso. Me siento feliz porque siempre he creído que este compositor es difícil de interpretar. Y no solo sus obras para piano. Amigos míos que tocan otros instrumentos también dicen lo mismo. No es de menospreciar que entre tantos participantes fui yo quien logró impresionar al jurado. De verdad me siento muy feliz”.

Actualmente, Lili está en el segundo curso de la Academia Nacional de Música Pancho Vladiguerov, en la clase de la catedrática Borislava Taneva, importante intérprete y pedagoga musical. Después de su regreso de Rabat, la capital marroquí, la joven pianista se dedicó a la preparación de su concierto en la sala Bulgaria. Además, tuvo una sesión fotográfica para su álbum.

“Integran el disco obras francesas como los 12 Preludios del Primer Libro de Debussy. Se trata de breves piezas, cada una dura tres minutos, las cuales logran recrear estados de ánimo tan diferentes. El otro compositor que presento es Cesar Fránck. Interpreto su Ciclo Preludio, Coral y Fuga. Son obras muy bellas. La idea es mostrar a creadores de un país que vivieron en la misma época pero crearon música de diferente índole. Comencé con las grabaciones el verano pasado y terminé el trabajo sobre el álbum en 2014. Aparte de algunas piezas en solitario interpretaré la Sonata para cello y piano de Debussy junto con Atanás Krastev. Decidí que es bueno mostrar otro lado de las obras de cámara de este compositor. Espero que el público viva bellos minutos con nuestra música y que el disco tenga buena acogida”.

Versión en español por Hristina Taseva