La mayor tragedia sangrienta en Francia comenzó con dos Kalashnikov y acabó con millones de lápices afilados. Uno de ellos es parte de la obra del caricaturista Jristo Komarnitski.
“Representa la Torre Eiffel, en cuya punta se encuentra el lápiz de la libertad de expresión – explica el autor –. Un terrorista pende de ella cual un King Kong contemporáneo y con su espada afila el lápiz”. Desde hace muchos años el dibujante logra encontrar siempre la parte divertida de las noticias y de la falacia que la élite política nacional produce. “Mis caricaturas son resultado de mi posición personal y de mi actitud hacia lo que está sucediendo” – refiere.
Sus obras suelen ser publicadas en las páginas del diario Sega. Anteriormente, trabajó para muchas ediciones de la prensa aparecida después de 1989, año del inicio de los cambios democráticos en Bulgaria. Si algún político nacional no se ha visto aparecer en las caricaturas de Komarnitski debería pensar seriamente hay algo en este país que dependa de él. Son blanco de su pincel los protagonistas que crean las noticias. No son pocos los casos en que algunos de sus personajes le han amenazado.
“A la luz de los acontecimientos que tuvieron lugar en París, sería absurdo quejarme de cualquier amenaza o de lo que fuera en mi trabajo. Cada caricaturista busca el desafío y con lo que hace pretende provocar una reacción. En cuanto a las reacciones negativas, este es el objetivo: despertar al público, como también al objeto de la sátira”.
El amor infantil de Jristo Komarnitski por “las imágenes cómicas” en la prensa se convirtió en su profesión y, después de los cambios democráticos, el dibujante se ha convertido en uno de los principales caricaturistas de Bulgaria.
“Yo hago un comentario visual de lo que está sucediendo. Podría decir que soy coautor de los políticos. Simplemente traduzco al lenguaje de la caricatura las ideas y mensajes que generan sus acciones”.
Esto sucede todos los días y el proceso es bastante agotador. Desde temprano en la mañana está en la vorágine de las noticias leyendo, reflexionando e identificándose con los sucesos. Siguen una decena de bocetos hasta que la idea tome una forma clara. Prefiere las herramientas clásicas de trabajo: el lápiz, el pincel y la pluma.
“Cada herramienta tiene su encanto y carácter – explica –. El pincel sugiere más suavidad, la pluma es más aguda, da una línea más sintetizada. El lápiz también transmite suavidad. Son medios de expresión como la paleta para el pintor. Mi herramienta favorita es el pincel fino”.
Jristo Komarnitski es uno de los principales dibujantes de Carle Cartoons, sitio estadounidense dedicado a la caricatura política.
”Publico en este sitio desde 1998. La guerra en la antigua Yugoslavia me indujo a cooperar con él porque el interés internacional hacia lo que sucedía en la región era muy grande. Como persona que crea cerca del lugar de los acontecimientos decidí incorporarme con mi trabajo. Sigo haciéndolo hasta hoy”.
Jristo Komarnitski es laureado de numerosos premios nacionales e internacionales. Sólo uno le sorprendió, el Premio Internacional de los Medios de Comunicación de Europa Sudoriental “Por los Derechos Humanos” 2010.
“Me sorprendió mucho ese premio – reconoce –. Me sentí bastante incómodo porque nunca me he considerado un luchador por los derechos humanos. Los miembros del jurado me explicaron que, según ellos, con mi trabajo diario hago precisamente eso”.
Versión en español por Daniela Radíchkova
Caricaturas: Cortesía de Jristo Komarnitski
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