A Petar Popangelovse le considera una leyenda del esquí búlgaro. El balance de su carrera competitiva es de 128 copas y 180 medallas. Durante 11 años, entre 1977 y 1988, participó en 37 competiciones de la Copa del Mundo de Esquí Alpino y ganó seis segundos y cuatro terceros puestos. En 1980 quedó en primer lugar en Lenggries, Alemania, en una ronda de la Copa del Mundo. En los Juegos Olímpicos de Invierno en Lake Placid (1980) y de Sarajevo (1984) obtuvo el sexto puesto en slalom. Tiene también tres títulos de slalom en los Juegos Universitarios de Invierno en España (1981), Bulgaria (1983) y Checoslovaquia (1987). Además, ha sido varias veces campeón balcánico en slalom y slalom gigante para hombres y adolescentes, 26 veces campeón de Bulgaria en todas las disciplinas alpinas y es portador permanente de la Copa de Bulgaria.



Petar Popangelov se calzó por primera vez unos esquís en 1962, con apenas 2 años y 11 meses en la cabaña de Musala. Empezó a esquiar cuatro años después, en la Copa Pioneer en la estación de esquí de Borovets, donde quedó en segundo puesto. A lo largo de los años, en Bulgaria entrenábamos solo antes de la temporada de las grandes competiciones, el resto del tiempo en los glaciares de Austria e Italia, donde se esquía todo el año, explica Popanguelov:

Un hombre que ha sido deportista sabe lo difícil y lo dulce que es una victoria, porque es fruto de mucho trabajo y suerte. Desde fuera parece fácil, pero se da más de lo que se recibe. Para tener éxito, sea en el ámbito que sea, debe haber una cierta dosis de talento que hay que combinar con esfuerzo, metodología adecuada y entrenamiento.

Respecto a la victoria del esquiador, lo más importante es ser más veloz que los demás, porque el tiempo es decisivo, pero también aprender de las derrotas. Y no solo en los deportes, está convencido Popanguelov. No hay pista en Bulgaria que no le guste. En el extranjero, en Madonna di Campiglio y en Garmisch-Partenkirchen (plata y bronce), no me gustaron demasiado las pistas en lo que respecta a pendientes y perfil, pero en ellas siempre obtuve premios en la Copa del Mundo, reconoce Popanguelov .



¿En qué se diferencian las competiciones esquí actualesde aquellas en los que participaba?

Ahora las pistas son mucho más duras y ya se esquía sobre nieve artificial. Y la velocidad es mayor en todas las disciplinas. La técnica es diferente, más brutal. Todo en el mundo se va desarrollando, no solo el deporte y el esquí, explica Popanguelov. Sin embargo, está convencido de que hay un límite que no se puede superar, aunque el esquí es un deporte de alta velocidad y el riesgo es grande. Él mismo no ha tenido ningún "estado de desesperación"; su único momento de crisis fue en 1985, cuando debido a una lesión le tuvieron que extirpar el bazo, pero siguió compitiendo hasta 1988, cuando se retiró a los 29 años.

No aspiraba a ser entrenador, continúa Popanguelov. Recibí propuestas de diversas federaciones, pero quería establecerme en Borovets y dedicarme a la hostelería. Y añade: En el deporte te concentras en una dirección, mientras que el negocio hotelero es un complejo y pesado.

Esquiar es un deporte caro, y para apoyar a jóvenes talentos ha dado su consentimiento y su nombre para la creación de la fundación "Petar Popanguelov y amigos por Borovets". Él opina que es bueno que los jóvenes tenganocasión de entrenar en el extranjero. Y que tengan éxito depende de ellos y de los entrenadores. Necesitan saber cómo combinar el entrenamiento con la concentración y la actividad mental, porque la competencia en el esquí es enorme, explica el esquiador.

Tres décadas después de las victorias de Popanguelov, actualmente el joven Albert Popov sigue los pasos del gran esquiador búlgaro, y con sus victorias aviva la esperanza de un nuevo resurgimiento del esquí en Bulgaria.

Ha dado un gran salto esta temporada. La pregunta es cómo lo percibirá su mente de ahora en adelante, ya sea que ha alcanzado la cumbre de su potencial o que aún puede desarrollarse; eso ya depende de él, concluye Popangelov.

Versión en español por Marta Ros