"Las gasolineras estatales serán emplazadas en las cabeceras de provincia importantes para servir de equilibrador en las ciudades. Consideramos que habría que localizarlas asimismo en las zonas donde falta competencia". Así lo ha expresado el ministro búlgaro de Economía, Emil Karánikolov. "Cada vez que se produce un alza del precio del crudo, el mercado búlgaro reacciona de inmediato, pero cuando la materia prima baja de precio, la reacción se demora. Por las gasolineras públicas la sociedad contará con una reacción más rápida y precisa a los precios reales", ha prometido el ministro. La estructuración de la nueva compañía petrolera, de un centenar de instalaciones, llevará dos años. Las primeras gasolineras podrán empezar a funcionar dentro de 9 meses a más tardar, ha precisado el ministro Karánikolov.