Sigue siendo muy intenso el tráfico en el puesto fronterizo de Kúlata–Promachonas, en la frontera entre Bulgaria y Grecia. La cola de automóviles es de unos cinco kilómetros y la de vehículos de carga de unos diez, ha informado la agencia de noticias búlgara BTA. Hay demora adicional causada por la entrada de serbios a Grecia, ya que son ciudadanos de terceros países. Todo ciudadano serbio hace declaración oral sobre dónde se alojará en Grecia, y a una gran parte se les hace testeo de Covid−19.

A causa del problema en el puesto fronterizo de Kúlata–Promachonas, la Policía recomienda a los viajeros que utilicen los puestos fronterizos de Ilínden, Makaza, Capitán Petko Voyvoda e Ivailovgrad.