“Estoy espiritualmente aquí, en Bulgaria y es por eso que no me resulta difícil escribir sobre ella, viviendo a miles de kilómetros de distancia”, dijo hace algún tiempo el escritor Martín Rálchevski. El autor originario de Sofía tiene en su haber casi una decena de libros, algunos de ellos publicados en inglés y ruso, y es graduado en Teología. La precaria situación económica de los religiosos en este país lo obligó a emigrar a Gran Bretaña, y aunque afirma que “los verdaderos búlgaros son los que permanecen en Bulgaria”, no deja de trabajar para preservar el espíritu búlgaro y la ortodoxia, valiéndose de la pluma como herramienta de trabajo.

“La fe en la eternidad me inspira”, dijo en su entrevista para Radio Bulgaria Martín Rálchevski​, quien en aquella ocasión acababa de lanzar su libro titulado El sentido en la vida, que además adaptó para la pantalla. Según algunas críticas, la obra es como una medicina: “hurga en el alma, revolviéndola y dejando en ella unos pocos rasguños y mucho amor”.

¿Qué sería aquello que podría hacer que los búlgaros expatriados algún día vayan a regresar a la patria para que la historia nacional más reciente adquiera matices positivos? Para que esto ocurra, ¿debería suceder un milagro como el descrito por Rálchevski en su libro? La respuesta a estas preguntas la pueden conocer en la publicación de Radio Bulgaria, pulsando AQUÍ.