El primer ministro de Bulgaria, Kíril Petkov, ha calificado su reciente visita a Skopie de “terriblemente retrasada”. De esta manera ha respondido a las críticas del presidente de Bulgaria, Rumen Radev, de que la visita habría sido apresurada.

”No hubiera podido soportar una demora en esta visita. Si no queremos que los Balcanes permanezcan como la zona más pobres, más corrupta y más descoordinada en la Unión Europea, habrá que cambiar de enfoque”, ha comentado el presidente del Ejecutivo.

En lo tocante a los relevos en la directiva de la compañía Bulgargaz y las palabras del jefe de Estado de que cuando se procede a tales relevos se ha de garantizar que no habrá intermediarios privados en los suministros del combustible azul, el primer ministro ha aseverado que ésta ha sido la decisión correcta y que él no tiene la intención de restaurar viejas prácticas de gestión.