El Consejo de Ministros ha aprobado en su reunión de hoy una visión estratégica para el desarrollo del sector eléctrico del país 2023-2053. La estrategia pretende que Bulgaria siga siendo líder en producción y exportación de electricidad en la región. El documento prevé el uso de carbón de lignito hasta 2030 y su reducción gradual y eliminación para 2038. Se construirán cuatro nuevos reactores nucleares para sustituir las capacidades que se desmantelerán. Dos de ellos se construirán en la central nuclear de Kozloduy y otros dos en la de Belene.

Se opta por el desarrollo de capacidades fotovoltaicas y eólicas y de turbinas de viento. Un elemento clave para el futuro es la producción de hidrógeno para reducir la dependencia de Bulgaria del gas natural importado. El coste estimado de la ejecución de todos los proyectos incluidos en la nueva estrategia energética asciende a unos 46.000 millones de euros.