Un ataque a las elecciones es también un ataque a la seguridad nacional. Con estas palabras la vicepresidenta, Iliana Yotova, comentó las preguntas del presidente Rumen Radev sobre la imparcialidad de las últimas elecciones parlamentarias. "Desde el comienzo de la campaña electoral nos hemos preguntado si las instituciones se contentarían sólo con captar a los pequeños distribuidores de votos comprados, o si llegaría a los garantes y a aquellos que intentan abusar de uno de nuestros derechos más importantes, a saber nuestro derecho a elegir", afirmó la vicepresidenta y exigió que las fuerzas políticas representadas en el parlamento también respondan a las preguntas presidenciales.

El líder de DPS-Nuevo Comienzo, Delyan Peevski, también afirmó que espera una respuesta de las instituciones estatales sobre el voto comprado y exigió una investigación sobre los informes.

"Cuanto más a menudo se celebran elecciones en Bulgaria, más preguntas quedan sin respuesta y las sombras del "alala-bala de las elecciones", los escándalos con códigos, memorias USB, máquinas y compraventa de votos e influencias aún se ciernen sobre el voto de los ciudadanos. Los políticos utilizan los miedos y preocupaciones de la población para lanzar su próxima campaña", añade Peevski.