Los inmigrantes búlgaros y rumanos generan más beneficios que gastos para Europa Occidental, sobre todo para Gran Bretaña e Irlanda, afirma el economista sueco Joachim Rust a quien cita la France Presse. Rust ha hecho los cálculos para Suecia, donde los búlgaros y los rumanos trabajan sin limitaciones desde 2007, y también para los 14 países comunitarios antes de la ampliación de la UE con países del hoy extinto bloque comunista. Su tesis es que no tienen fundamento los recelos de algunos países europeos ante el supuesto grave fardo que significaría una oleada de inmigrantes rumanos y búlgaros. Sus cálculos hacen ver que un inmigrante de Rumania o Bulgaria aporta un 30% más de lo que cuesta él mismo al país en que se ha establecido.