La capital de Bulgaria ya dispone de una nueva zona para el paseo y el descanso en uno de los barrios céntricos de la misma. Se trata del parque “Vazrazhdane”, o sea, Renacimiento, recientemente construido que se extiende sobre un área de 5,2 hectáreas y ofrece diversos entretenimientos a los visitantes, tanto niños como adultos.
La primera cosa que salta a la vista mientras uno transita por los sinuosos paseos son los grupos de adolescentes, cómodamente sentados sobre la hierba, quienes están charlando o jugando a los naipes y las personas libro en mano, sentadas en los bancos Se eleva sobre el parque el bullicio del entusiasmo de los niños que se están rociando de agua mutuamente en la interactiva “fuente seca” que semeja una pequeña plazoleta de las que brotan chorros de agua. Es el área más atractiva para los niños que también pueden disfrutar de un recinto en que hay columpios, deslizaderos y un área de arena.
Loa aficionados al deporte pueden circular en bicicleta, hacer jogging o jugar al tenis en las canchas rojas. Ha sido construido asimismo un anfiteatro de 90 plazas que será escenario de diferentes manifestaciones culturales.
La segunda etapa de la construcción del parque “Renacimiento” contempla habilitar un área para la construcción de un circo.
Desde luego, los visitantes más numerosos en el parque son los padres acompañados por sus pequeños hijos. Una madre que está paseando con su hijita dice que el parque es muy bueno pero que: No hay ningún árbol en una de sus zonas y así, con el calor veraniego uno no podrá sentarse a la sombra. Vivimos cerca de este parque y estábamos impacientes por verlo inaugurado ya que, antes, el lugar era un descampado. Ahora acudimos al parque para ver la fuente y el área para juegos infantiles. También esperamos que se construya el circo que antiguamente existió en esa misma zona.
La mayoría de quienes visitan este parque señalan la falta de árboles copudos capaces de proporcionarles frescor en el bochorno veraniego. Los árboles viejos fueron erradicados durante las obras de construcción, y la nueva forestación no es capaz todavía de ofrecer sombra suficiente.
Algunos de los que llegan al parque recuerdan cómo era el lugar años atrás. ”Cuando era joven en ese lugar vendían ladrillos y otros materiales para la construcción. No resido en esta zona de Sofía pero como ayer la alcaldesa Yordanka Fandakova estuvo prodigando elogios sobre este parque, he venido a verlo”, dice el señor Pavlov, sentado en un banco para descansar y gozar del sol primaveral.
Otro aficionado a los paseos por la tarde va acompañado por su perrito y señala: El parque es muy bueno pero no hay ninguna vegetación. No sé por qué han eliminado los árboles que había aquí. Hace muchos años en esta zona había un estadio y me hubiera gustado que se construyera otro nuevo. Los paseos se han habilitado en forma paralela y nos cuesta rodearlos a mí y a mi mascota”.
Una madre que pasea a su bebé dice: “El parque es muy hermoso. Vivo en el edificio residencial ahí detrás del parque y volveré acá frecuentemente. La zona es estupenda y se ha producido un cambio importante en todo el barrio”.
En la construcción del parque se han invertido unos 3 millones de euros, de los cuales 2 han sido ofrecidos por una inmobiliaria importante de Sofía, y el resto lo ha proporcionado el Fondo de Desarrollo Urbano Sostenible de Sofía en el marco del programa “Jessica”. Se trata del primer parque de nueva construcción en Sofía en los últimos 30 años y pese a la falta de verdor suficiente-en la que se fijan todos los visitantes-el parque “Vazrazhdane” ha podido insuflar nueva vida a uno de los lugares, hasta no hace mucho abandonados y desérticos, en el centro de la capital de Bulgaria.
Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: Hristina Taseva
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