“En las primeras horas de la guerra, Bulgaria condenó la agresión de Rusia. Nos hemos sumado a todas las sanciones, pese al elevado precio social. Los búlgaros han abierto su hogar y su corazón a los ucranianos”. En estos términos se ha expresado el jefe de Estado búlgaro, Rumen Radev, al cabo de su reunión con el ministro de Exteriores de Ucrania, Dmitró Kuleba.

“Insistimos en una investigación internacional rápida y un castigo para los responsables de las atrocidades cometidas”, ha agregado el presidente Radev, y ha expresado su esperanza de que Kiev haga todo lo posible para reducir las víctimas entre la población búlgara en Ucrania. En la reunión el Presidente ha manifestado que Bulgaria está dispuesta a restaurar el programa para el tratamiento de militares ucranianos.