En una reunión con el alcalde de Sofía Vail Terziev el ministro del Interior en dimisión Kalin Stoyanov ha prometido que serán adoptadas medidas para garantizar la seguridad y la tranquilidad de los habitantes y de los huéspedes de la capital. Será extremada la presencia policial en la parte céntrica de la ciudad, en regiones donde se concentran personas de distinto origen étnico, así como en proximidad a los centros de alojamiento para refugiados. Las medidas han sido adoptadas después de peleas en el centro de Sofía entre jóvenes búlgaros y extranjeros. “Insisto en que estos casos que tuvieron fuerte repercusión en medio de la sociedad no se utilicen con fines políticos y que no sirvan como intentos para provocar conflictos raciales”, ha declarado Stoyanov. En sus palabras, no hay un aumento de los delitos de desorden público con la participación de inmigrantes que residen legamente en el país.