“En 2024, las democracias se beneficiaron de los cambios políticos y tecnológicos, desbancando a líderes fracasados, abandonando ideas anticuadas y adoptando nuevas prioridades bien fundadas”. Así se expresó el presidente Rumen Radev en la quinta edición del Foro Económico de Sofía. Radev afirmó que 2025 se perfila como un punto de inflexión no sólo para Bulgaria, la región de los Balcanes y Europa, sino también para el mundo.

"La arquitectura geopolítica de seguridad se está derrumbando, los modelos económicos establecidos desde hace tiempo se resquebrajan, la recesión se está instalando permanentemente en las principales economías europeas y la tecnología sigue desarrollándose cada vez más estrepitosamente", afirmó el jefe de Estado haciendo un llamado a que se encuentren las causas de los síntomas, para poder curar el atraso de Europa. La Unión Europea tendrá que reformar profundamente su estructura de gobierno y sus mecanismos de toma de decisiones para actuar con rapidez y concentrar importantes recursos en sus ambiciones estratégicas, instó Radev.