El turismo es uno de los sectores del país mejor preparados para seguir funcionando sin problemas tras la adhesión de Bulgaria a la eurozona, según la Dra. Polina Karastoyanova, directora ejecutiva de la Oficina Nacional de Turismo. En este sector, incluso en la actualidad, la mayoría de los precios de hoteles, servicios y viajes son ofrecidos en euros por los operadores turísticos, ya que trabajan con ambas monedas, tal como exige la ley.

"La subida de precios solo se producirá en función del aumento en los costos de suministros, servicios y bienes, es decir, de los elementos que conforman el producto turístico", añadió Karastoyanova.

Durante un debate especial sobre el tema celebrado en Sofía, representantes empresariales y expertos detallaron los próximos pasos y cambios que Bulgaria debe llevar a cabo para estar plenamente preparada para su incorporación a la eurozona el 1 de enero de 2026.

• La adopción del euro hará Bulgaria más atractiva para los turistas

En relación con el importante paso que se avecina para Bulgaria, los representantes del sector turístico han formulado diez preguntas concretas a las instituciones responsables del país. Muchas de ellas ya tienen respuesta en el Acta de Introducción del Euro y en la página web de información evroto.bg.

"En Bulgaria tenemos el lujo de contar con más de un 40 % de apoyo al euro sin prácticamente ninguna campaña de información", declaró Stanislav Popdonchev, vicepresidente de la Asociación Industrial de Bulgaria.

Sin embargo, las empresas están especialmente interesadas en conocer la fecha exacta de entrada en la zona euro, ya que es un factor clave para la adaptación de los programas informáticos que utilizan.

"Sabremos la fecha exacta de la entrada del euro probablemente en junio. Deben publicarse los informes de convergencia, que esperamos sean positivos y luego comenzará una serie de reuniones del Consejo de la UE, donde se adoptarán tres decisiones.

La primera se refiere al tipo de cambio, que no puede fijarse sin el acuerdo de Bulgaria. La segunda determina la fecha de introducción del euro, que suele ser a principios de año. Esto significa que, si la fecha establecida es el 1 de enero de 2026, las empresas tendrán aproximadamente seis meses para preparar todos sus procesos y programas informáticos para operar con la nueva moneda", explicó Stanislav Donchev.

Por su parte, el viceministro de Finanzas, Metodi Metodiev, aseguró que no existe riesgo de que el tipo de cambio del euro sea distinto al acordado en las decisiones adoptadas por mayoría cualificada en la Asamblea Nacional.

"El segundo 'ancla' es la permanencia de nuestro país en el Mecanismo de Tipos de Cambio ERM II y el requisito de permanecer allí al menos dos años. La idea detrás de esta condición es evaluar si se producen tensiones en el tipo de cambio durante ese período.

Bulgaria, como país con una junta monetaria (currency board), ha declarado unilateralmente su adhesión al tipo de cambio fijo. Durante los más de dos años que hemos formado parte del mecanismo, la junta ha funcionado perfectamente. Por lo tanto, cualquier especulación sobre su estabilidad carece absolutamente de fundamento".

En cuanto a la preparación de la administración estatal para su trabajo con la nueva moneda, el viceministro dijo que la implantación del software necesario avanzaba a buen ritmo:

"En la última reunión del Consejo de Coordinación para los preparativos de Bulgaria para la zona euro, se informó de que el 76 % de los organismos estatales ya han firmado anexos a sus contratos y han tomado medidas con sus respectivos proveedores para adaptar sus programas informáticos. Espero que en los próximos meses este porcentaje alcance el 100%".

En una entrevista con Radio Bulgaria, la presidenta del Consejo Económico y Social de la República de Bulgaria, Zornitsa Rusinova, destacó la necesidad urgente de lanzar una campaña nacional de información sobre el proceso de sustitución del lev por el euro.

"Los principales problemas en este momento están relacionados con el hecho de que la población no tiene claro cuál será el período para el cambio gratuito de monedas. Hemos recomendado que este período sea lo suficientemente largo, aproximadamente un año, y que durante ese tiempo los precios se indiquen tanto en leva como en euros. Esto permitirá a la gente seguir posibles cambios en los precios, señalarlos si es necesario y, al mismo tiempo, acostumbrarse a la nueva moneda.

Es fundamental que el período de cambio sea amplio. Actualmente, está previsto que dure seis meses, durante los cuales los bancos y Correos Búlgaros realizarán el cambio de moneda sin comisiones".

Traducido y publicado: Borislav Todorov