En la noche del domingo, 30 de marzo, a las 03:00 horas debemos cambiar las manecillas del reloj una hora adelante, a las 04:00 horas. De esta manera dormiremos una hora menos en la noche concreta, pero podremos aprovechar la luz del día y esto debe disminuir los gastos de luz e incrementar el tiempo para actividades al aire libre.

El cambio del horario dos veces al año es practicado en Bulgaria en los últimos 46 años. Para muchas personas esto representa un gran estrés ya que hace falta tiempo para adaptarse al nuevo horario.

El cambio de la hora con frecuencia conlleva una discordancia del reloj biológico, aumento del cansancio, estrés y riesgos para la salud, dicen los médicos. A juicio de los psiquiatras, este cambio causa problemas para menores y adultos y estado está relacionado con un cambio temporal y desorientación, que se parece al cambio del huso horario durante largos viajes. Hay personas que se adaptan con más dificultad a este cambio y en su caso los problemas continúan durante semanas.