La controversia en torno a la introducción del euro y la pertenencia de Bulgaria a la eurozona es más una cuestión política que económica y social. Así lo afirmó el primer ministro  Rosen Zhelyazkov, en Blagoevgrad durante una reunión informativa de la Campaña Nacional de Información para la Introducción del euro en Bulgaria.

El primer ministro señaló que, con la adopción del euro, Bulgaria pasará a formar parte de un mercado de casi 400 millones de personas. No aceptaremos una moneda extranjera, aceptaremos nuestra moneda europea, señaló el primer ministro.

Los beneficios a largo plazo son mucho mayores que las acciones de relaciones públicas a corto plazo con las que ciertas fuerzas políticas intentan calmar los temores de la ciudadanía. El objetivo de estas campañas informativas es disipar el temor de la ciudadanía a la introducción del euro. Dentro de un año este período se percibirá de forma completamente diferente, predice Zhelyazkov.

Redactor Ivo Ivanov

Traducido y publicado por Vladislav Púnchev 

Foto: BGNES