Nos ha abandonado el padre Iván de Novi Han, han informado los medios de información basándose en información del alcalde de la aldea de Yakimovo, Gueorgui Gueorguiev. El padre cobró gran popularidad con la noble causa a la cual había consagrado su vida: dar calor, hogar y esperanza a cientos de niños y personas necesitadas, informa Darik Radio. A través de los años cientos de personas encontraron hogar en su asilo san Nicolás en el templo santa Trinidad y en casas comparadas por él en la aldea de Yakimovo. Eran ancianos necesitados, madres con hijos y huérfanos, niños problemáticos que contaban con su apoyo y cuidados. A pesar de su avanzada edad, los problemas con la salud y otros retos que afrontaba, el padre Iván no se rindió y continuó desvelándose por pobres, abandonados y personas sin hogar en sus momentos más difíciles en la vida, convirtiéndose en símbolo de la abnegación y la piedad cristiana hacia el prójimo.