El ministro de Medio Ambiente y Agua, Manol Guenov, ha declarado protegidos dos árboles centenarios, cada uno con una edad aproximada de 200 años, según ha informado el Ministerio.

Uno de ellos pertenece a la especie Ulmus laevis, con un perímetro de tronco de 4 metros y una altura de unos 24 metros. Se encuentra cerca de la ciudad de Pleven, en el norte de Bulgaria. El otro es un ejemplar centenario de la especie Quercus cerris, con un perímetro de tronco de 2,40 metros y una altura de unos 15 metros. Este árbol se encuentra cerca de la localidad de Trankovo, en la provincia de Haskovo, en el sur del país.

Con la declaración de ambos árboles como protegidos, se prohíbe su arranque, tala, poda, rotura de ramas, daño en los troncos y cualquier otra acción que pueda provocar su destrucción, deterioro o el empeoramiento de su estado fisiológico.

La orden se publicará próximamente en el Boletín Oficial del Estado, tras lo cual los árboles serán inscritos en los registros conforme a los requisitos de la Ley de Diversidad Biológica y se designarán oficialmente como árboles centenarios.