La estrategia se atiene a los objetivos y las prioridades de la estrategia energética europea y apostará por la eficiencia energética, el desarrollo del mercado energético y del gas, la implantación de nuevas tecnologías, el fomento de fuentes de energía alternativas. Es prioridad para Bulgaria lograr la diversificación de recursos, fuentes y proveedores. En conformidad con los objetivos europeos comunes hacia el año 2020 Bulgaria deberá contar con un 16% de fuentes de energía renovables, lograr una reducción del 20% de las emisiones de carbono y mejorar en un 50% la eficiencia energética.

La crisis del gas de enero de 2009 puso de relieve la necesidad de enlazar la red de transportación de gas de Bulgaria con las de Grecia, Turquía y Rumanía. Se espera que hasta finales de octubre la Comisión  Europea sancione las medidas indispensables. John Ordway, encargado de negocios de la embajada de EEUU en Bulgaria resaltó que los pequeños países han de aunarse en una red común de transportación de energía eléctrica ya que los proyectos de envergadura no son capaces de sustituir las políticas pequeñas. En respaldo a estas palabras Edward Chau, experto del centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington comentó que gran número de países, dependientes en el sector de Energía, han encontrado la combinación justa de soluciones de escalas reducidas como por ejemplo, la diversificación de los suministradores de energía y el uso de fuentes de energía renovables. De este modo estos países reducen el riesgo económico y su dependencia de monopolios. En respuesta, el ministro búlgaro señaló lo importante que es el asunto relacionado con la apertura de los mercados en el plano internacional:

“Al considerar su situación estratégica y las necesidades del país Bulgaria ha iniciado en los últimos años una serie de proyectos estratégicos, importantes no sólo para la seguridad energética nacional sino también para la de la zona y para la UE, comenta el ministro. Se trata de los proyectos de construcción  de los gasoductos “Nabucco” y “South Stream”, de la segunda planta nuclear búlgara, la de Bélene y el proyecto del oleoducto “Burgás-Alexandrúpolis”. El “Nabucco” es prioritario para la UE y para Bulgaria puesto que su materialización deja resueltos todos los asuntos relacionados con la diversificación, tanto las fuentes como los trayectos, al estructurar un sistema nuevo que posibilita suministros procedentes de la zona del Caspio y del Oriente Medio. El “South Stream” ofrece un nuevo trayecto para el suministro de gas de Rusia y satisfará también la demanda de otros países europeos”.

En la mesa redonda se señaló que Bulgaria gasta en energía un 1,17% de su PIB mientras que en Alemania el porcentaje por el mismo concepto es de un 0,17%. Si se acepta que el sector de Energía de Bulgaria presenta un consumo cuatro veces superior a la media   comunitaria esto significará que sólo con mejorar la eficiencia energética Bulgaria podría duplicar su PIB sin que aparezca una demanda adicional de energía. Según los expertos del Centro de Estudio de la Democracia los lobbies nucleares y del sector hullero trabajan en contra de la diversificación. Según los mismos expertos hay que mantener una posición mucho más activa que recoja los intereses nacionales, con respecto a los cuatro pilares de la política de la UE en el terreno de Energía. Se trata del sector económico basado en bajas emisiones de carbono, de energía en situaciones de emergencia, de nuevos trayectos energéticos y de mayores posibilidades de elección para los usuarios”.

Versión en español de Mijail Mijailov