El tiempo seco y caluroso no favorece a los agricultores, pero sí a los salineros - aquellos que extraen la sal en la costa del mar Negro. La extracción de sal es una de las actividades más antiguas de los pomorenses: las Salinas de Pomorie existen desde el siglo V a.C. De allí se estuvo extrayendo sal hasta 1951, habiéndose construido una línea de ferrocarril especial entre Burgas y Pomorie para transportarla.
En Pomorie, hasta hace un siglo, la sal era extraída literalmente por todas las familias de pescadores de la ciudad, que la utilizaban tanto para almacenar el pescado como para comerciar con ella.
Con los cambios que provocó la pandemia Covid, en Pomorie acabó cerrando sus puertas la última empresa de extracción de sal que quedaba en activo. Con el aumento de los precios de la electricidad como telón de fondo, la extracción de sal resultó ser un negocio de pérdidas. Actualmente, las únicas salinas en funcionamiento en esta ciudad costera forman parte del Museo de la Sal de Pomorie. Este es uno de los 100 Sitios Nacionales de Interés Turístico de Bulgaria y es también el único Museo de la Sal especializado en toda Europa del Este.
“La mejor época para recoger sal de las salinas de Pomorie son los calurosos días de verano, cuando no cae una sóla gota de lluvia en todo un mes”, así lo afirma el director del museo, Iliya Kusev, en su charla con los visitantes.
Él nos cuenta que Pomorie siempre ha producido la mejor sal de los Balcanes, quizás incluso de Europa, ya que esta tiene además cualidades nutricionales beneficiosas. Incluso los sultanes turcos encargaban sal de Pomorie para hacer más deliciosos sus platos.
Lo particular de las únicas salinas que se siguen conservando en Pomorie, es que el agua salada se extrae directamente del Lago de Pomorie - un lugar muy frecuentado, sobre todo en los meses de verano.
Otro valioso recurso del lago salado de Pomorie es su barro curativo, así como el hidróxido de potasio, o potasa cáustica, obtenida como resultado de la extracción de sal. Todo esto, combinado con la hermosa naturaleza, la ciudad rodeada de playas, el aire puro y el espíritu pesquero que se conserva en la ciudad, hace de Pomorie un lugar muy atractivo para las personas con afinidad por el turismo cultural.
En las fotos:
El "kelve" realiza la función de bomba de agua. Con la ayuda de un caballo se hacía girar un cilindro cual turbina cuando el agua del lago no podía llegar a las salinas por medio de la propia gravedad.
El hombre del remo es Dancho, un salinero hereditario de la ciudad de Pomorie.
Autor: Gergana Mancheva
Versión en español: Alena Markova
Fotos: Gergana Mancheva
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