El 25 de noviembre la Iglesia Ortodoxa Búlgara honra la memoria de San Clemente de Ohrid. Destacado arzobispo, profesor y escritor de libros, fue uno de los alumnos más destacados de los hermanos Cirilo y Metodio, los santos Siete, los primeros maestros de los búlgaros. Después de la muerte de Santo Metodio (885) expulsado de Moravia, los santos Siete llegaron a Bulgaria. El zar Boris los recibió y les encargó la tarea de ilustrar al pueblo. Clemente fundó una escuela educativa en Ohrid con 3.050 estudiantes. El zar Simeón en 896 lo nombró obispo de Drembitsa o Velitsa, en cuya diócesis estaba incluida Ohrid. Fue el primer obispo búlgaro que brilló con hazañas y realizó milagros: murió en el año 916.
San Clemente de Ohrid es el patrón espiritual de la primera institución de educación superior búlgara: la Universidad de Sofía, que lleva el nombre del santo.
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